Ciertamente el tetzlaffianum podría ser un híbrido de pearcei que algún vivo mandó para Canada, porque aquí en Venezuela vivos han habido bastantes...jejejeje
El labelo de los caudatum que hemos visto en Venezuela tiene el borde del labelo con algunas venas marron suave y en la cara externa se pueden observar lineas color crema-marron sin llegar al rojizo.
Saludos
Gerardo
El 2 de enero de 2011 13:29, jan pahl <janpahl@gmail.com> escribió:
Kanavaru, estas subespecies de caudatum siempre me han intrigado en una cosas, son ''cerradas'' o ''abiertas'', me refiero, ¿hay área de cline entre una y otra?El 2 de enero de 2011 13:17, jan pahl <janpahl@gmail.com> escribió:no te preocupes por esas nimiedades, los mismos botánicos leen estas cosas con un ''tesauro'' de conceptos de taxonomía, al igual que los químicos que siempre llevan la tabla periódica con su respectiva lista de isótopos ''estables''
El 2 de enero de 2011 13:04, José Cuevas <jmcuevas01@gmail.com> escribió:Dios Santo!!!!"flores bastante grandes con un PERIGONIO formado por 6 TÉPALOS libres, 6 estambres extrorsos y un ovario súpero, tricarpelar y trilocular".Donde me he metido yo? Todo esto me salió en la busqueda del significado de "staminodio". Será que cambió tanto el programa de biología en bachillerato con los años? Y yo que creia que la educación era degenerativa; es decir, que disminuye su calidad con el transcurso del tiempo. La verdad esto me hace sentir mas viejo.Saludos.
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Algunos, no es que quieran prohibir y seguir prohibiendo, lo que realmente desean es prohibir la democracia al prohibir al individuo, y por último a sí mismos, porque no se soportan, no soportan su propia naturaleza. Están permanentemente enfadados con el mundo que les rodea, que les es ajeno, y pretenden derogarlo. El problema no es lo que hay alrededor, sino la vocación de uno mismo de sobreponerse a ello.
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Algunos, no es que quieran prohibir y seguir prohibiendo, lo que realmente desean es prohibir la democracia al prohibir al individuo, y por último a sí mismos, porque no se soportan, no soportan su propia naturaleza. Están permanentemente enfadados con el mundo que les rodea, que les es ajeno, y pretenden derogarlo. El problema no es lo que hay alrededor, sino la vocación de uno mismo de sobreponerse a ello.
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